Se denominan reservas de papel a aquellos espacios protegidos, en este caso reservas marinas, que pese a estar reconocidas legalmente y estar plasmadas en drecetos ley, carecen de los medios técnicos y económicos para su correcto funcionamiento.
Carecer de medios económicos, que directamente implican a los técnicos, conlleva hablar básicamente de vigilancia, uno de los pilares fundamentales para el correcto funcionamiento de este tipo de espacios, y la cual es necesaria tanto para no hacer caer en la tentación a los mas responsables, como para mantener alejados a los furtivos irresponsables.
En este contexto de recortes y austeridad en el que estamos inmersos el sector pesquero de Lira y Cedeira, impulsores de las únicas reservas marinas de interés pesquero en Galicia, están mostrando su gran preocupación ante la falta de apoyo por parte de la administración pública a estas figuras. A escasos días para el término del contrato de vigilancia todavía no saben si seguirán contando con el apoyo institucional.
En el mar del descontento existente ante recortes en sanidad, educación, servicios sociales... esta situación puede parecer "pecata minuta" ante otros frentes, pero es precisamenta el bajo esfuerzo que se le pide a la administración, lo que dificulta comprender el porqué a este silencio.
Para decirlo llanamente, el sector ha calculado que lo que la administración autonómica debería aportar sería poco más que el sueldo anual de seis mil euristas, no pondré cifras, pero la operación no conlleva dificultad. Esto no quiere decir que la vigilancia de un espacio marino no sea costoso, que lo es, pero este coste se reparte entre Administración Autonómica (18%), Estado (12%) y Europa, los Fondos Europeos de Pesca (70%), y dando el primer organismo el visto bueno, los otros dos ya cuentan con dicho gasto en sus presupuestos.
El costo de la vigilancia es un tema que lleva dando quebraderos de cabeza a estas dos cofradías desde hace años, y es el propio sector el que parece haber encontrado métodos para abaratar sus costes tanto a corto como a medio plazo, y que precisamente coinciden, con la austeridad que tanto se alaba. Entre las propuestas se encuentran: sacar a concurso público el desempeño de la vigilancia para elegir la opción más eficiente, flexibilización de horarios de los vigilantes (por qué trabajar días de temporal en los que no hay nada que vigilar?), o la implantación en las embarcaciones de dispositivos de seguimiento por satélite, entre otras. Ante estas propuestas la Administración ha venido demostrando cualidades endémicas muy criticadas en la actualidad, como: falta de flexibilidad, organización, y el escaso compromiso político que se suele tener con aquellas acciones, que sin tener que ver con política, para bien o para mal, surgieron durante la legislatura de un color distinto. Ante esto es preciso añadir que el propio decreto de creación de las reservas señala a la Administración como "responsable de facilitar los recursos necesarios" para el correcto funcionamiento de estas (art 10).
Las razones para mantener este tipo de herramientas son de todos los colores y sabores: Las especies en estos entornos han aumentado tamaño y número, con lo que un sector en declive como el pesquero artesanal rentabiliza más su esfuerzo, maximizando el beneficio y por lo tanto fijando población a las localidades; se resalta la figura del pescador como máximo custodio del recurso que le da de comer y la gestión que realiza de este; existen convenios internacionales como el realizado en la Conferencia Mundial para la Biodiversidad que busca la protección de un 10% de los océanos para 2020 (en Europa no llegamos al 1%); o que estas experiencias pioneras han sido modelos a copiar tanto dentro como fuera de las fronteras.
Toda esta situación no es nueva, ya el año pasado ambas cofradías fueron notificadas de la ampliación del convenio de vigilancia, por un año mas, el mismo día en que este terminaba. Esperemos que pese a todo, la historia vuelva a repetirse para la próxima semana, y que se sienten las bases para tratar de encarar de mejor forma situaciones futuras.
Muchos medios están recogiendo esta situación, quedan un par de links para el que quiera profundizar:
La opinión: El fin del contrato de control amenaza las reservas marinas de Lira y Cedeira
La opinión: La Xunta busca un acuerdo con la empresa que vigila las reservas marinas
La opinión: La Xunta busca un acuerdo con la empresa que vigila las reservas marinas
excelente artigo, noraboa polo blog e ánimos os mariñeiros de Lira e Cedeira
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